Un Camino a Casa (“Lion” por su título en inglés), nos cuenta la historia del pequeño Saroo (Un encantador Sunny Pawar), quien vive con su madre y sus hermanos en un poblado de la India que sufre de una extrema pobreza, y quien, en un intento por intentar ganar más dinero para ayudar en casa, se ve separado de su hermano en una estación de trenes, donde sin querer se queda dormido en uno, en el cual se aleja miles de kilómetros de casa. Viéndose obligado a sobrevivir en muy duras condiciones y completamente solo, sin suerte de poder encontrar a su familia, finalmente es adoptado por una familia australiana (Nicole Kidman y David Wenham), dándole así una nueva oportunidad de vida, a pesar de estar tan lejos de su país de origen. Veinticinco años después y ya convertido en un hombre, Saroo (Dev Patel) comienza a verse atormentado por el sentimiento de pensar lo que debe sufrir su familia al no saber nada de él, lo que lo llevara a un largo viaje de auto-descubrimiento sobre sí mismo y su pasado.

Garth Davis apenas comienza a recorrer el mundo de la dirección cinematográfica (tiene más camino en publicidad, cortos y tv), pero vaya que se ha metido de lleno y con el pie derecho, pues ya está nada más y nada menos que en la carrera del Oscar, una cinta muy visceral, esperanzadora, cruel por momentos, pero muy realista en cuanto a una situación que miles de niños viven día a día, así como también el ver que una familia puede ser tanto de sangre, como de aquella que decide acogerte y darte la mejor vida posible, aun sin tener una responsabilidad directa, si no escoger tenerla y quererte incondicionalmente.

La película por buena parte de su desarrollo es capaz de dejar devastado al espectador, para después, si, después de una buena lloradera, permitirle también sentir un poco de esperanza en que, cosas difíciles, que bien podrían parecer imposibles, pueden también tener un final feliz.

En cuanto a las actuaciones, cabe destacar de inicio, la actuación del fabuloso Sunny Pawar, quien conquista el corazón a la vez que te lo rompe cada que lo ves activar su instinto de supervivencia en cada una de las situaciones que vive… endemoniadamente encantador el niño. Dev Patel una vez más demuestra las grandes tablas que tiene y nos hace preguntarnos por qué le costara de pronto tanto trabajo encontrar papeles para interpretar, pues siempre se desenvuelve de maneras positivas. Pero a mi parecer, quien brilla de una manera que hace mucho tiempo no hacía, es Nicole Kidman, que es quien afianza la historia y quien nos entrega varios de los momentos más duros y a la vez más bellos de la cinta.

Un Camino a Casa es todo un viaje a los sentimientos, donde el protagonista nos lleva con el de la mano, haciéndonos sufrir con él al unísono, que no me sorprendería pueda hacerse de un par de premios, pues su calidad lo merece.

Vaya que “Lion” es capaz de estremecer a cualquiera, y es una película que nadie debería perderse… una verdadera joya.