¿Existe realmente un “momento indicado” para reiniciar una saga? ¿Para brindarle una nueva cara o un nuevo estilo? A mí me parece que no, y me gusta la idea de que Saban haya decidido brindarle a los fans la emoción de volver a ver a sus héroes en acción, en una cinta de gran presupuesto con mucho efectos especiales y readaptada a nuestros días, porque aceptémoslo, fans de los Power Rangers no hay pocos (a mí no me tocaron, pero mi hermana tenía una gran fijación con ellos cuando chica), y en verdad me ha tocado ver mucha emoción alrededor de la cinta.
El director Dean Israelite nos trae una “re imaginación” de estos clásicos personajes, pero ahora (como es moda en el cine) en una versión mucho más oscura, lo cual me parece perfecto, porque estamos hablando de hacer “evolucionar y crecer” un grupo de personajes cuyos fans también ya crecieron, y que no creo disfrutarían igual si se mantuvieran tan infantiles en su ejecución.
Cinco estudiantes inadaptados, terminan unidos gracias a unas extrañas rocas que les han brindado súper poderes, para después descubrir que no ha sido una casualidad, pues han sido escogidos especialmente para convertirse en los “Power Rangers”, y tendrán que luchar en contra de Rita Repulsa, quien solía ser la “Ranger Verde” y ahora solo le interesa obtener poder. Ellos descubren que no solo deben aprender a trabajar juntos, sino a confiar entre ellos, para así, poder tener acceso a la fuerza de las piedras y poder salvar no solo a su pueblo, si no al mundo.
Alejándose del estilo “botarguero” de la serie, ahora los héroes llegan con armaduras mucho más estéticas y modernas, y con acción mucho más “fuerte” que en anteriores presentaciones. Un error que admito me parece arrastra un poco la película hacia abajo, es el querer presentar demasiado a los personajes, el esforzarse tanto en demostrar que “son chavos con problemas e historias como tú”, que el inicio se hace eterno y le impone un ritmo algo cansado, pues tenemos que esperar bastante tiempo para verlos en acción ya con las armaduras, pues deben superar conflictos internos, olvidar sus diferencias y aceptarse a sí mismo, dejando de lado el verlos patear traseros y pues… a eso íbamos ¿no? Eso fue lo único que me evita decir que esta es una gran película, pues se los digo sin reservas, que fui pensando que entraría a ver una basura de película, y salí con la idea de haber visto al menos, una buena e interesante, si bien mal desarrollada idea.
Los chicos que interpretan a los Rangers son bastante carismáticos y con buena presencia en pantalla, pero quien verdaderamente le da gran estilo a la misma es Bryan Cranston en su papel de Zordon, la gigantesca cabeza mentora de este grupo de héroes, y quien ahora, aunado al hecho de que Rita solía ser una Ranger, tuvo en su momento, el papel de líder del grupo hace millones de años y se desempeñaba como el Ranger Rojo (y si, vale la pena ver a una “rejuvenecido” y bastante marciano Cranston en traje de Ranger)
Obviamente, para los fans, será un verdadero deleite volver a verlos en acción, montados en sus Zords y acercándose a la batalla al grito de “Go Go Power Rangers” (si, sale la canción en la película), cosa que los llevará dando brincos de alegría hacia su más tierna infancia.
Si bien la cinta es mucho más recomendable para quienes eran fans de la serie, puede que si les gusta la acción ligera y palomera, puedan salir al menos “no a disgusto” de esta película.