Lo primero y más importante para este review, es decirles que mi bagaje con el cine ruso es técnicamente nulo (creo que solo vi Nightwatch, y seria mentira decir que la recuerdo mucho).
Habiendo confesado lo anterior, esta semana tuve la oportunidad de ver “La Novia”, cinta de terror dirigida por Svyatoslav Podgayevsky (uuuf), la cual trata sobre una pareja que viaja a la casa de la familia del marido para tener la ceremonia de la boda con las “viejas costumbres”. Eventos bizarros comienzan a suceder durante su estadía, hasta que poco a poco comienzan a descubrir que el pasado de la familia es demasiado oscuro y que, durante siglos, un siniestro acontecimiento ha tomado lugar en esa casa.
Si ustedes no están familiarizados con la tradición victoriana de la fotografía post-portem, esta se popularizó, dado que, en esa época, el nivel de muertes era muy alto, y de esta manera, las familias intentaban lidiar con la muerte de sus seres queridos, en espera de que el recuerdo y el espíritu pudiera seguir viviendo a través de la foto. Hoy ese tipo de imágenes ya solo se utilizan en el ámbito medico (y que bueno… #creepy)
Nastya e Ivan deciden casarse, pero la familia de él no está dispuesta a dejar pasar el evento sin tener una ceremonia a la vieja usanza, por lo que viajan a la antigua mansión donde por generaciones han vivido para llevar a cabo la boda, hasta que el oscuro secreto comienza a surgir y amenaza la tranquilidad de todos, así como la vida de Nastya.
Lo primero que llamo mi atención fue tanto la ambientación como la fotografía, ideal para una cinta de terror, pues la fotografía es caprichosamente llamativa, ambientada de manera pesada y sombría, muy al estilo de la Hammer en los años 70, especialmente en las escenas del bosque y los flashbacks que ayudan a contar un poco el trasfondo de la historia, mezclando lo misterioso con lo sobrenatural, mostrando las fotografías de los muertos, así como sacrificios y cadáveres que se levantan de la tumba… justo el ambiente necesario.
Aquí es donde me considero un poco perdido, en cuanto a la dirección, pues no conozco al público ruso ni sus preferencias, pero creo que la dirección pierde un poco el rumbo llevando la historia de manera tan lenta, con diálogos cortos sobrecarga de imágenes y escenas que se extienden, a mi parecer, a veces de más.
Y es ahí donde siento que vienen sus puntos flacos, pues la edición por momentos es bastante mala, cortando escenas que podrían ser bastante efectivas, en especial donde quieren pasar de la nada entre pasado y futuro, cosa que puede confundir a más de uno, al menos de manera momentánea.
A pesar de ese pequeño tipo de problemas, que comúnmente solo molestan a los más exigentes, La Novia termina siendo una interesante diversión, así como una buena manera de conocer cine de otros lados.
Creo que será del agrado de los fans del género de terror.