Peter Parker, en esta ocasión interpretado por Tom Holland, está de vuelta en la pantalla grande, y en esta ocasión, estamos ante un Spider-man, que por mucho es más un “Spider-boy”, pues tanto su experiencia sobre cómo ser un superhéroe, al de la vida diaria, son bastante básicas, por lo que en lugar de lidiar con problemas como las consecuencias psicológicas y sociales sobre los vigilantes, la violación de la libertad civil o el lidiar con daño colateral, tenemos a un adolescente que carga con cierta responsabilidad, y que la disfruta como tal… ama ponerse su traje y salir a patrullar, ayudar a la gente y después ver los videos que la gente sube a Youtube y cómo aumenta su número de seguidores mientras empata todo esto con su día a día escolar, cosa nada sencilla.
Los problemas vienen del crush que tiene con una chica llamada Liz, y sin que el planeta esté en riesgo de desaparecer o ser conquistado, Adrian Toomes (Michael Keaton) lleva años dedicándose a robar tecnología alienígena resultado de las batallas de los Avengers, para crear armas super poderosas que después vende en el mercado negro, poniendo en riesgo las vidas de los Neoyorkinos. Finalmente, lo que nos quiere decir el subtítulo de la cinta (mal traducido en español como “De Vuelta a Casa”, y que debió ser algo más como “Baile de Graduación”) es llevarnos de vuelta un tanto a cuando este tipo de películas eran mucho más simples, y cuya finalidad era simplemente entretener.
Ahora, si pensamos que lo que Peter intenta lograr en una total independencia y crecimiento como héroe, eso es algo que le costará bastante trabajo, ya que como vimos en “Civil War”, su mentor, Tony Stark (Robert Downey Jr.), lo estará vigilando muy de cerca, asegurándose que no haga nada que él no haría (ni tampoco nada que el haría), brindándole así, una especia de “figura paterna”, y de un mal encarado guardián en la figura del siempre dispuesto “Happy” (Jon Favreau), quien funciona como el enlace entre Spidey y Tony… Y si todos pensábamos que esto iba a terminar siendo más bien una especie de “Iron Man 4”, puedo decir que la presencia del “Cabeza de Hojalata” al final no es tan invasiva y le da cierta dirección a la cinta, obviamente con miras a “Infinity Wars”.
Holland nos regala un Spider-man a quien aún molestan porque su voz suena infantil (esperen a ver el modo de “Interrogatorio” de su traje) y que sigue siendo el chico listo de siempre y que no pierde oportunidad para hacer bromas mientras pelea, manteniendo una línea para no volverse pesado o caer mal, y si puedo decir que algo me sorprendió, es que no hay una sola indicación de que haga uso de su “Sentido Arácnido”, que si bien es obvio lo usa por momentos, no hay referencias directas a él.
Decidí dar una oportunidad al papel que interpretaría Zendaya, y para no spoilear, solo diré que me decepciono mucho la dirección que tomaron con el personaje, termina siendo muy forzado y terriblemente oportunista, cosa que nada tiene que ver con aquel borlote que se armó en redes sobre si ahora tendríamos una MJ negra… pero si es desafortunado, al menos para mí, a donde llevan al personaje.
El mejor amigo de Peter, Ned, de inicio es un personaje simpático, pero cuando se da cuenta de que su amigo es Spider-man, se vuelve un poco odioso, es un personaje del que podría ver bastante menos y sería beneficioso para la historia… en verdad llega a ser algo cansado.
Pero el postre de la cinta, es el villano, del señor Michael Keaton, un contratista que pierde dinero cuando una empresa de Tony Stark llamada “Damage Control”, le quita el trabajo de remover los escombros de las batallas de los Avengers, poniendo en peligro su patrimonio, y quien decide robar la tecnología de dichas batallas para crear armamento de alta tecnología, lo que nos lleva a un villano con un propósito y no un plan malvado, para él, la manera de sobrevivir, y darle lo mejor a su familia, es a través de este turbio negocio, el cual lleva a cabo con un impresionante traje volador de metal y alta tecnología (Chitauri y de Ultron). Keaton es un villano siniestro, lleno de personalidad que inunda la pantalla y que te hace desear que tuviera mucho más tiempo de acción, además de darle un gran “twist” a la cinta, apareciendo justo donde menos lo esperaríamos (siempre y cuando no se hayan spoileado nada).
¿Qué si Spider-man Homecoming es la mejor cinta de superhéroes y del universo Marvel? No, claro que no, pero es una cinta entretenida, que comprende que está dirigida a un público joven, millenial, cargado de tecnología y que es muy distinto a lo que nosotros estamos acostumbrados, y que sabe que sería ridículo mostrar a un joven que no encaje con el perfil de la época actual. Con un inicio lento, la película entiende hacia dónde va, y sabe perfectamente que no solo es el rumbo que decida tomar en solitario, sino que debe estar ligado a su hermano mayor, pero que, en algún momento, deberá recuperar el rumbo, cuando deba volver a estar en modo independiente.
Spider-man Homecoming esta lo más alejada posible de las anteriores encarnaciones (Maguire y Garfield), dandole peso tambien a su vida como Parker, quien finalmente es todavia un estudiante que debe de sortear mil y un problemas, pero creo que esta historia se sostiene por sus propios medios, y es una película que los chicos disfrutarán, pero que también, aquellos con más edad, podrán pasar un momento agradable viendo al trepa muros en acción.
¡RECOMENDADA!