Tomb Raider… Lara Croft vuelve más millenial que nunca

Quince años tuvieron que pasar para que la famosa Lara Croft volviera a ser interpretada en la pantalla grande, después de que fuera Angelina Jolie quien le diera vida en un par de cintas, ahora con Alicia Vikander en el papel de la famosa exploradora, pero si por un momento creen que verán un papel similar, bueno, no podríamos estar más equivocados.

En esta ocasión Lara tiene un “nuevo origen”, pues ahora la conoceremos a sus 21 años, alejada completamente de la fortuna y empresa de su padre, pues este tiene años desaparecido, y de aceptar ella el control de la misma, seria aceptar que este ha fallecido, por lo que vive al día y se dedica a repartir comida (lo siento, para mi desde ahí ya sonaba demasiado lejano a lo que tengo en mente que es Lara Croft), eso sí, practica todos los días en un gimnasio a pesar de no poder pagarlo.

El inicio se torna bastante largo al llevarnos a conocer la vida de Lara en la ciudad, la vemos involucrarse en una carrera de bicicletas con la que intentara ganar algo de dinero mientras se mezclan flashbacks de su padre, eso sí, muy bien coreografiada dicha secuencia, además de ser musicalizada por Junkie XL, cosa que le da buen empuje.

Las piezas del rompecabezas empiezan a juntarse en su vida, y justo cuando está a punto de darse por vencida y aceptar la herencia, descubre que su padre dejo pistas del lugar hacia donde se dirigía y la razón de su desaparición, estaba en busca de una remota isla japonesa llamada Yamatai, donde se encuentra el cuerpo de una extraña y maléfica princesa que, según cuenta la leyenda, seria clave para la posible destrucción del mundo… y pues… obviamente hay que ir a buscarla ¿no? En lugar de dejarla en paz.

Aaaah si, tampoco podemos dejar de lado que detrás de Lara, hay una maléfica compañía que también busca hacerse del control de este hallazgo para… no se… controlar el mundo.

 

 

Naufragios, tormentas, armas, cascadas y muchas, muchas balas en contra del arco y flecha de Lara, así como mucho CGI malogrado, llegan con esta versión nueva en la pantalla grande del videojuego, con una protagonista que se aleja de su versión más sexy, para convertirse en algo un poco más asexuado, por la simple razón de convertirla en una heroína y no en una imagen más atractiva como solía ser, haciendo una llamado así, a su versión más feminista (no que tenga nada de malo, solo lo digo como es), aunque, si esa era la intención, no entiendo cómo es que la única mujer que se lanza a la aventura, pero bueno, supongo eso lo veremos resuelto en próximas entregas (de haberlas, claro, porque me parece que la cinta tendrá una recepción muy tibia, además de durar dos horas y media).

La aventura arqueológica queda totalmente de lado y solo nos quedan constantes escenas de enfrentamientos y disparos, para reducir la deducción de las trampas y acertijos (que siempre destacaban la inteligencia fabulosa de nuestra protagonista) a juntar un par de cristales para hacer color verde porque ese es el color de la vida… ¿really? Demasiado ajeno a la gran heroína que yo conocía.

El principal problema de la cinta es que intento tomarse demasiado en serio, entonces, al llegar a las escenas de aventura que deberíamos poder aceptar como increíbles, ya salen de toda realidad y se vuelven un tanto absurdas, y pues lo siento, Alicia Vikander no es Lara Croft. Punto.

Si tendrá continuidad o no en un futuro, solo lo decidirá la taquilla, para mí, preferiría ver una versión del comercial de Barbara Blade y Lady Speed Stick extendida… o peor aún, preferiría volver a ver Tomb Raider: La Cuna de la Vida.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *