El mundo de “Un Pequeño Favor” es uno lleno de contrastes, y que te demuestra que sin importar que tan pegada pueda estar pegada tu casa con la del vecino, los matices y los detalles entre uno y otro pueden ser abismales.
Stephanie (Anna Kendrick) es madre soltera, hiperactiva y super entusiasta, además de ser videoblogger y toda su dedicación va a sacar adelante a su hijo, sin importar los malabares que tenga que hacer.
Pero su vida da un giro de 180° el día que conoce a Emily (Blake Lively), una mujer elegante, misteriosa y muy reservada y con la que, por medio de la amistad entre sus hijos, terminara convertida en “mejor amiga”, cosa que parece transcurrir de forma muy normal, hasta el día que Emily le pide recoger a su hijo de la escuela y cuidarlo, pero intempestivamente desaparece por varios días, lo que la obligará a ella y al esposo de Emily, Sean (Henry Golding), a comenzar una frenética búsqueda, que terminará destapando un pasado desconocido y bastante oscuro de aquella que alguna vez presumió conocer.
Basado en la novela homónima de Darcey Belly (2017), “A Simple Favor”, por su titulo en inglés, es adaptada por Jessica Sharzer y dirigida por Paul Feig, quien como sabemos, tiene buena mano con películas protagonizadas por mujeres, nos ofrece una cinta, llena de giros de tuerca, que de inicio parece tener un ritmo apacible, peor que va cobrando fuerza ritmo conforme va avanzando la trama mientras juega con las expectativas del público, destruyéndolas por completo, para llevarlo al final de la historia sin tener una idea como terminará todo, además de estar cargada de bastante humor negro.
Digamos que es algo así como una versión un tanto mas divertida de “Gone Girl”.
Lo que llamo mas mi atención de la película, es el ver, como dos actrices, con perfiles tan diferentes, pueden llegar a tener tan buena química, a pesar de que sus personajes también son polos totalmente opuestos, sin eclipsar una a la otra en ningún momento, y eso si, como siempre Anna es increíblemente divertida, y que precisamente, es quien funge como la narradora de la historia.
No tiene ningún desperdicio la banda sonora de la cinta, que corre a cargo de Theodore Shapiro, y del cual reconocerán varias canciones y del que estoy seguro, varias llegarán a su colección.
Probablemente el mayor traspiés de la película es que la resolución de la misma, carga demasiado la mano hacia el lado cómico, y si bien no la demerita, corta un poco con el tono medio lúgubre logrado con el ir conociendo el pasado de Emily, pero varios momentos y diálogos de la misma, son las que le dan el estatus de ser una película interesante, divertida y recomendable.
https://youtu.be/naRv55xxX5g