Pasaron nueve años para que conociéramos el desenlace de las aventuras de Hipo y Chimuelo, el simpatico duo de vikingo y dragón que tomaron por sorpresa tanto el mundo la animación como el corazón de los fans, siempre con aventuras llenas de peligros y momentos enternecedores.
Después de muchos obstáculos, toca el turno a este par de madurar y aprender a hacerse responsables, no solo de ellos mismos, si no de aquellos que los rodean, respectivamente los reinos de los vikingos y de los dragones, estos últimos, al parecer cada mas objetivo de cazadores, gracias a que sus números se siguen engrosando en Berk. Tanto Hipo como Chimuelo, deberán aprender a valerse por si mismos y a no depender siempre el uno del otro, todo esto, mientras un cazador de Furias Nocturnas toma como tarea exterminar al ultimo de esta raza.
La premisa suena satisfactoria, como que deberíamos estar ante un gran cierre de trilogía, y en papel lo estamos, pero no tanto en ejecución. No voy a negar que la película tiene buenos puntos a favor, aboga por la reflexión y la emoción, la amistad, obviamente la tecnología ha mejorado mucho la animación en esto nueve años, iluminación, personajes, fluidez de movimiento, texturas, escenarios, si visualmente es encantadora también así como varios guiños que estoy seguro varios de ustedes identificaran sin problemas.
También cuenta con un sinfín de nuevos diseños de dragones, obviamente siendo la principal “Furia Luminosa”, la cual puede hacerse invisible, y quien también hará la parte de interés amoroso de Chimuelo, quien pasa la película enamorado y distraído por lo mismo, y el dragón del villano, el cual tiene un diseño como de escorpión combinado con una araña venenosa.
Pero estas historias siempre habían sido pensadas para ser disfrutadas por chicos y grandes, y extrañamente, en este caso, me parece que no lo logran satisfactoriamente, por que al menos a mi, en mi condición de adulto, pasados unos 20 minutos, se me empezaron a cerrar los ojos, por que al menos en ese tiempo, no pasa nada realmente interesante o medianamente significativo además de tener escenas innecesariamente largas y en muchas cosas, ridículas. El villano Grimmel se siente blandengue, como que sabemos que es una “amenaza” por que, pues es el malo y eso tiene que significar, no por que realmente lo parezca, y si no lo hubieran incluido en la cinta, nada habría cambiado realmente, esto, contagia al relato y lo hace sentir demasiado clásico, demasiado “lo hicimos con el manual en la mano” y esto le pierde frescura y hace sentir el final demasiado predecible.
Lo siento, se que muchos me van a odiar, pero en verdad me siento decepcionado con esta entrega considerando lo mucho que me gustan las dos anteriores, es lenta, predecible, y si, tierna y por momentos simpática, pero en verdad, me parece que pudieron haber cuidado mas su producto y no haberse ido tanto solamente por el lado de la sensibileria.
Pero ni que decir de todos modos la van a ir a ver.
https://youtu.be/iMW43hQyQ-E