Review de “Bliss” de Amazon Prime… cuando “The Matrix” se topa con “Trainspotting”

Sin mucha complicación, te puedo decir exactamente las preguntas que te formularás mientras ves “Bliss” en Amazon Prime… ¿Es real el mundo que se nos presenta? ¿Son alucinaciones? ¿Efecto de las drogas? ¿Qué demonios esta pasando?? (créanme, yo mismo me las hice… aunque también les recomiendo poner atención a los entornos en que se mueven los protagonistas).

Eso sí, advertidos, “Bliss” los llenará de éstas preguntas, pero en ningún momento esperen respuestas (y eso, estoy seguro no sentará bien a muchos espectadores), no esperen explicaciones ni el saber cómo funcionan realmente las cosas; para empezar, esa sería una manera completamente errónea de verla, pues la idea es experimentarla, no resolver sus incógnitas.

También es importante darse cuenta de que, aunque sí, puedes llegar a formarte una idea de qué es lo que realmente pasó, todo termina quedando en segundo término, pues lo realmente importante, es lograr un análisis apasionado y genuino acerca de la fragilidad humana, papel que recae absolutamente en la gran interpretación de Owen Wilson y su personaje Greg, un hombre que con una vida y un trabajo normal, se está desmoronando. Ha perdido toda pasión por su trabajo, su familia y por la vida en general, y lo único que puede hacer ya, es dibujar la casa de sus sueños y la hermosa mujer con quien la habita (aunque más que un sueño, para él es un recuerdo, a pesar de que no tiene ni ha tenido en ese mundo una casa remotamente parecida), cosa que no tiene contento a nadie en su oficina… así que, cuando el jefe lo manda llamar, es obvio que las cosas no pueden estar bien. Aún así, sin importar que tanto sus compañeros le insistan en que no puede demorarse más en atender el llamado, él sigue distrayéndose, como si no existiera manera de que algún otro pensamiento ocupara su mente y eso, en términos de definición de personaje, por parte del director/escritor Mike Cahill, dentro de los primeros minutos de la historia, es una maravilla.

¿Qué le pasa a Greg? ¿Siempre ha sido así? ¿Está sucediendo algo en su vida que lo tenga así de alterado? ¿Acaso son las pastillas que está tomando? ¿Acaso importa? No, no estamos interesados en conocer su estado físico o mental, no estamos investigando una nueva enfermedad o patología, ni siquiera si todo es a causa de su divorcio, o el que su familia, a excepción de su hija Emily (Nesta Cooper) lo hayan hecho a un lado. Es un hombre que con cada paso que da, crece más su dolor.

De pronto aparece en su vida Isabel Clemens (Salma Hayek), una extraña mujer con pinta de pordiosera, que no solo sabe todo sobre él, sino que se le presenta como la solución a todos sus problemas, y para confundirlo más, le informa que todas las personas a su alrededor no son reales, todos (o la gran mayoría) son simulaciones generadas por computadora por lo que, con el poder de su mente, puede doblegarlos a su voluntad, desde tropezarse al caminar o aventarse de una ventana… claro que ese poder no se genera solo por que sí, sino que debe tomar unas pastillas amarillas que le ayudarán a soltar ese potencial.

Ahora, ¿Qué es lo que le da un plus a esta cinta? ¡Que puedes verla de muchas maneras distintas y nunca equivocarte! ¿Quieres pensar que Isabel tiene la razón? Entonces estamos frente a una historia de mundos paralelos. ¿Todo está en la cabeza de Greg? Entonces es una historia sobre los terribles efectos de las drogas y la depresión. ¿Quieres verla por el lado humano? Entonces podemos ver un análisis de cómo muchas veces la gente busca refugio dentro de la fantasía para olvidar el mundo, y de lo sencillo que es terminar rechazado por la sociedad y unirte a las estadísticas de gente que vive en las calles. Realmente no importa el ángulo desde el que decidas verla, al final, todo converge en una simple elección y en una pregunta: ¿En qué mundo decides vivir? Y ¿Qué puede traer a una persona de vuelta a la realidad?

Salma también tiene un gran papel doble, pasando de ser dominante a insegura, de estar motivada por el enojo, a moverse por todos lados con una confianza falsa, llena de dudas. Comienzas analizándola por que pues ella parece saber más que él… más que todos… ¿podemos confiar en lo que ella parece/cree saber? Los dos protagonistas se ponen en gran papel para explicarnos y confundirnos con cada decisión tomada.

 “Bliss” es una historia consistente, extraña y llena de emociones muy humanas que en ningún momento pide que el público sienta pena por sus personajes.

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